Philip Pullman y el derecho a ofenderse

No one has the right to live without being offended.

Nadie tiene derecho a vivir sin sentirse ofendido.

Philip Pullman

Philip Pullman publicó en 2010 una novela titulada El buen Jesús y Cristo el malvado (The Good Man Jesus and the Scoundrel Christ). Con semejante título, ya os podéis imaginar que en su día causó cierto revuelo. Y me ha encantado encontrarme con este fragmento de conferencia donde le preguntan si no le parece que su novela es ofensiva.

Como dijo Douglas Adams, cuando se habla sobre religión, parece que debamos dejar al margen la lógica que usamos al discutir sobre otros temas como política, educación, ciencia…

[Hablando de religión]

-Aquí tienes una idea o un concepto que son sagrados y de los que no puedes decir nada malo.

-¿Por qué no?

-Porque no.

Douglas Adams, discurso en Digital Biota 2, Cambridge

Al hablar sobre religión es muy fácil que enseguida se juegue la baza de «eso que acabas de decir ofende mis creencias».

A mi también me ofenden muchos aspectos de la religión: la cantidad de muertos en guerras de fe, el hecho de que ningunee el pensamiento crítico, la típica visión tan arraigada de que alguien que es ateo es alguien amargado, triste, sin objetivos en la vida (la serie de True Detective, por ejemplo, me encanta, pero me cansa esa visión que da). La diferencia es que yo no juego la baza «esto me ofende» y espero que mi interlocutor retire su postura: busco razonamientos, datos… Y eso se pudo ver muy bien en el debate de Bill Nye con Ken Ham sobre el creacionismo: muchos datos por una parte y tan sólo creencias por la otra.

Debate con creacionistas. Fuente.

Debate con creacionistas. Fuente.

Porque como dice Pullman en el vídeo, es imposible pretender vivir sin que algo te ofenda alguna vez.

La sombra de la tijera es alargada

Hay días en los que El Mundo (pun intended, en un párrafo entenderéis la broma) conspira para buscarte las cosquillas. Y yo no estaría escribiendo esto si no fuera por dos situaciones:

-Acabo de abrir el correo y me he encontrado la confirmación de lo que ya sabía: que me voy a quedar sin parte de la beca Erasmus, la parte correspondiente que tenía que poner el Gobierno de España, porque el otro día colaron en el BOE como quien no quiere la cosa una nueva condición para poder acceder a ella. El haber sido beneficiario de una beca general del MECD (Ministerio de Educación Cultura y Deportes) el año pasado.

Imagen

-Encontrarme con este artículo de Sostres. Sostres, son tres hostias las que ahora mismo te querría meter. Y yo soy alguien pacífico.

Vayamos por partes. Para quien no lo sepa, le pongo en situación. Los que estamos de Erasmus llevamos ya unos dos meses en el extranjero. Cuando solicitas el Erasmus, tu plaza va asociada a una beca, cuyos fondos vienen de tres sitios: Europa, tu comunidad autónoma y España. Hay comunidades autónomas que han reducido o suprimido su ayuda. Pero la clave está en que cuando haces cábalas y echas cuentas a la hora de irte de Erasmus, tú cuentas con el dinero de esas becas. Los 115 € de Europa y los 130-150€ que se supone que iba a asignarte el Estado español. Dinero que, en Reino Unido, da para pagar el alquiler, y eso si tienes suerte.

Y muchos nos fuimos con esas cuentas en la cabeza, tras hablarlo mucho con nuestros padres y tirando un poco de aquí y otro poco de allá, vimos que se podía. Y ahora de repente, llega Wert y dice que los 130 € que le toca poner al Estado sólo los vas a recibir si el año pasado fuiste becado por el Ministerio. Y si no, apáñatelas como puedas. Señor ministro, muchos de los que estamos de Erasmus no tuvimos beca o no pedimos una beca porque vivíamos en la misma ciudad en la que estábamos y por tanto, al vivir con nuestros padres, no necesitábamos esa ayuda. Si queréis más información sobre esto, se ha montado salvemoserasmus.es.

Ya jode bastante que hagan esto a tus espaldas, esperando a que lleves dos meses fuera de casa para clavarte el puñal, como para que venga el listillo de turno a tocar las narices.

Los Erasmus son ridículos desde el punto de vista académico y el único interés que tienen es etílico y sexual. Ni siquiera sirven para conocer el país donde vas, porque estás demasiado borracho para conocer nada y demasiado ocupado intentando follar.

Te voy a contar una pequeña historia. La historia de alguien que se metió a estudiar Física con la esperanza de poder estudiar algo de astrofísica un día. Esa persona es el abajo firmante, y tenía planeado irse a Canarias a hacer el último año de la carrera (y seguramente intentar hacer el máster allí) porque en esas islas hay un puñado de científicos irreductibles que siguen haciendo su trabajo a pesar de los permanentes ataques y recortes presupuestarios. Porque la formación que podían darme ahí era muy buena. Pero resulta que decidieron quitar las becas del programa Séneca y tuve que replantearme muchas cosas. Y ahora estoy en Reino Unido, en Southampton, en una universidad donde tengo acceso a una formación que de otra forma no hubiera tenido. ¿Eso te parece ridículo desde el punto de vista académico? ¿El que yo pueda elegir lo que quiero estudiar o especializarme en algo que no hubiera podido en mi universidad de origen te parece ridículo? Porque no soy solo yo, mucha gente se va de Erasmus por eso. Para tener oportunidades que en España no tienes. Y sinceramente, si te vas de Erasmus para irte de juerga, tienes un serio problema.

No voy a comentar más sobre el artículo de Sostres (para reproducir gilipolleces en el blog, ya pongo las mías propias), entre otras cosas por el tufillo rancio y machista con el que escribe. Se describe solo y con el cabreo que llevo estos dos últimos días no creo que pudiera terminar de escribir esto.

PD: sí, si os metéis en el Facebook de gente que está de Erasmus veréis fotos de fiesta o viajando. Pero es que nadie se hace fotos estudiando.

La alfalfa y la mierda

Había una vez una granja autosostenida, mantenida a base de alfalfa y mierda. Al frente de todo estaba la oveja mayor; algunos dicen que con el paso del tiempo y la ayuda de la evolución natural de Maquiavelo, la oveja cambiaba de especie para convertirse de forma inevitable en un cabrón, a veces un chivo con su barbita e incluso gafas. La granja funcionaba bien: el cabrón al frente tenía un bebedero y un botón, al que si le daba con la pata salía pienso. De vez en cuando le llovía un sobre de alfalfa.

No tenía que hacer otra cosa más que beber y darle al botón. Y luego cagaba. La mierda resbalaba por el suelo, un poco en pendiente, para pasar por los establos del resto de ovejas felices, que también tenían su abrevadero y un botón parecido al del jefe. A algunas incluso les llovía alfalfa de vez en cuando. La mayoría de esas ovejas llegaban limpias a la granja, pero poco a poco el inevitable flujo de mierda les acababa manchando. Pero les daba igual, eran felices con su agua y su botón, mientras soñaban con la lluvia de alfalfa.

Si seguías el rastro de la mierda, siempre acababa cayendo sobre Manuel, que estaba al final de la granja. Manuel es un tipo que trabaja 10 horas diarias, con su escoba y su manguera, limpiando la enorme cantidad de mierda que generan las ovejas. Parte de la mierda que Manuel barre va a parar a una compostería cuyos dueños son amigos de la oveja convertida en cabra y que usan esa parte de mierda para hacer un abono con el que hacen crecer alfalfa. La mierda sobrante la barre Manuel y va a parar debajo de una alfombra.

De vez en cuando la alfombra revienta, regando de mierda a las ovejas. Es entonces cuando el cabrón mayor sale a escena y las ovejas balan embelesadas.

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Ovejas balando. Fin de la cita.

Es entonces cuando Manuel se pregunta qué cojones hace tragándose la mierda de las ovejas, cobrando 700 € al mes y sin ver un duro de alfalfa. Fantasea con meterle el palo de escoba por el culo a una de las ovejas, enchufarle la manguera al cabrón mayor y dejar que reviente. Y se marcha con un portazo. Pero a las ovejas les da igual: ellas tienen su agua, su botón, alguien que les limpia la mierda… y de vez en cuando les llueve alfalfa.

Concentración por la Ciencia #14J

Últimamente las malas noticias para la investigación y la situación de la ciencia en España son un goteo continuo: el observatorio del Calar Alto, investigadoras que van a concursos televisivos para conseguir la financiación necesaria, investigadores que consiguen una financiación de 200.000 € para que luego la universidad se los deniegue… A poco que os mováis en círculos científicos, son temas de los que se habla constantemente.

El problema es que esto no llega a la gran parte de la sociedad. Y mucha gente no entiende el tremendo papel que ha jugado y sigue jugando la ciencia a la hora de llegar hasta donde estamos hoy: vacunas, avances médicos, tecnologías que facilitan la vida y los trabajos pesados, avances en la producción agroalimentaria… son avances que la sociedad da por sentados y que hubieran sido imposibles sin esos científicos que son vistos por mucha gente como personas en bata blanca y un tanto excéntricos.

Son avances silenciosos pero constantes que a día de hoy, al menos en España, corren peligro por la política de constantes recortes. Y muchas veces los investigadores son invisibles: si hacen huelga ¿quién lo nota?

Por todo esto, sólo os voy a pedir un favor: mañana 14 de junio, a las 12:00, venid a la escalinata del Paraninfo si estáis en Zaragoza. Si no estáis en Zaragoza, tenéis las convocatorias de las manifestaciones por la ciencia aquí.

Ken Robinson: Cómo escapar del Valle de la Muerte en la educación

Los que conozcáis TEDTalks, probablemente os suene la figura de Ken Robinson. Para los que no, os hago un pequeño resumen: las charlas TED son charlas breves, de 20 minutos como mucho, que tratan diversos temas. En el caso de Ken Robinson, sobre los sistemas educativos y la necesidad de cambiar el modelo actual.

Muchas de las ideas a las que se hace referencia en la charla y en las que se nombra el caso de EEUU me parece que son de aplicación aquí. Por ejemplo, el preocuparse por salir bien en los tests y no en si la persona aprende. El dar pocas alternativas a aquellas personas que, por diversos motivos, abandonan el sistema educativo. Muchas veces son ideas obvias, pero que no tenemos en la cabeza al hablar de educación.

Carta abierta a Eduard Punset (y la PFDPMMPIH)

Querido Eduard Punset:

sé que no va a leer esto. Ni me importa. Es más bien un pequeño desahogo, para dejarme la mente tranquila. Todo viene a raíz de este artículo suyo: «La felicidad no está necesariamente donde uno espera» y otros artículos suyos similares donde nombra el principio de incertidumbre de Heisenberg para justificar los ¿argumentos? más absurdos.

La validez de la mecánica y la física cuánticas se basa, como cualquier teoría científica, en la precisión de sus predicciones. La física cuántica estudia fenómenos que suceden en sistemas microscópicos como los átomos. No podemos percibir estos efectos en objetos macroscópicos: la dualidad onda-partícula sirve para describir un electrón, pero una pelota de tenis la podemos tratar como una partícula.

La validez de esta teoría está en sus resultados, capaces de explicar (por ejemplo) los espectros de emisión y absorción característicos de cada elemento:

Espectro de emisión del hierro

Deje de mezclar la mecánica cuántica con conceptos como «el futuro es incierto», «la felicidad» o «no podemos prever lo que va a ocurrir en el futuro». ¿Por qué? Por dos razones:

  • La física cuántica no tiene nada que ver con conceptos como la felicidad, la sabiduría la incertidumbre del futuro. En cuanto a incertidumbre, ya le digo: la validez de la teoría reside precisamente en las buenas predicciones que hace para muchísimos fenómenos físicos que no tienen nada que ver. El principio de incertidumbre de Heisenberg dista mucho de ser una carta blanca para decir: todo vale. Lo mismo que la relatividad de Einstein no equivale a «todo es relativo».
  • Es usted el referente en divulgación para muchísima gente, debido a la popularidad que tiene debido a programas como Redes, o los libros que ha publicado. Para esas personas, usted va a ser el único contacto, la única ventana que van a tener con la ciencia. Un gran poder conlleva una gran responsabilidad, y en su caso ya ha metido la pata presentando pseudociencia como si fuera ciencia varias veces: Mauricio José Schwartz lo explica con calma aquí. Porque en estos temas, o eres riguroso siempre, o no eres fiable nunca*.

Por eso me va a permitir que funde una pequeña asociación: PFDPMMPIH. Plataforma de Físicos Damnificados por Punset y su Manía de Malinterpretar el Principio de Incertidumbre de Heisenberg. No hay carnet de miembro, ni cuota. Pero seguro que retrata la sensación que tenemos muchos físicos al oírle hablar (si es así, podéis decirlo en los comentarios). Por favor, deje de utilizar la cuántica para justificar cualquier cosa. Los físicos (y estudiantes de física, como yo) se lo agradecerán enormemente.

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PD: nada de esto hubiera ocurrido si no estuviera en exámenes. Porque por una parte ya estoy acostumbrado a las barrabasadas punsetianas. Pero cuando estás 3 horas rompiéndote la cabeza estudiando mecánica cuántica y al hacer un parón en el estudio lees el artículo que enlazo al principio por tuiter… qué queréis que os diga… te cabrea un poco.

*La frase es de Mauricio José Schwarz, espero que me permita la licencia de incluirla, porque me parece que describe muy bien la situación.

Edito: en Menéamepor si quieres votar la entrada, darle difusión o unirte a los comentarios.

Edito: Como van varias personas que preguntan si se pueden hacer el carnet de la asociación… aquí os dejo un carnet de muestra. Con gato de Schrödinger incluido (o no ;)):

Carnet socio Punset

La situación absurda de la ciencia

Son las 10 de la mañana de un día griposo, y España sigue siendo un país maravillosamente absurdo, al menos en lo que a ciencia se refiere. Lo digo por las noticias que tengo ahora abiertas para leer:

Faltan científicos en Europa, pero el sistema educativo que vamos a tener es científicamente analfabeto, se anulan becas de doctorado, burlándose de los investigadores y con salarios ridículos.

Esto parece un sketch de los Monty Python, pero de aquí a no mucho seguro que será uno de los círculos de Dante.

We stopped dreaming

Mientras escribo estas líneas tengo abierta en otra pestaña del navegador el streaming del lanzamiento del rover Curiosity, comentado por Daniel Marín y Javier Peláez. Y no puedo dejar de pensar que estamos enviando Curiosity a Marte. Un planeta que está a millones de kilómetros.

En menos de 250 años hemos pasado de poder volar con el globo aerostático inventado por los hermanos Montgolfier a mandar una pieza de tecnología punta a Marte.

En apenas 250 años, un 0.2% del tiempo que llevan los Homo Sapiens Sapiens andando por la Tierra, hemos pasado de sólo poder soñar con volar a considerarlo algo normal.

Estoy seguro de que el lanzamiento de Curiosity saldrá en los medios tradicionales (especialmente en televisión) como una noticia marginal, y la gente no se sorprenderá mucho. ¿Qué nos ha pasado? Como diría Neil deGrasse Tyson: hemos dejado de soñar.

Pequeño homenaje a Carl Sagan

Ayer, Carl Sagan habría cumplido 77 años.

Cosmos es para muchos el primer contacto que tuvieron con la divulgación científica (no es mi caso, me habría encantado haberla visto y disfrutado cuando tenía 14 o 15 años), o el primer contacto con el escepticismo científico. Sagan tenía esa capacidad de ilusionar, de contar con pasión y a la vez de forma entretenida astronomía, ciencia en general e incluso historia. Al relacionar todos esos temas, da cierta perspectiva sobre el mundo, una perspectiva más amplia de la habitual, exactamente la que transmite el vídeo de arriba, que hoy en día es muy necesaria.

Uno de sus libros, El mundo y sus demonios, tiene como subtítulo la frase: «La ciencia como una luz en la oscuridad». Creo que no me equivoco si digo que para una generación, la anterior a la mía, la serie Cosmos y sus libros tuvieron parte de culpa a la hora de decidirse por estudiar ciencias. Sagan ayudó a encender esa llama. No dejemos que se apague.

El otro punto azul pálido

Ayer fue un día agridulce. Vimos despegar el último transbordador espacial, el Atlantis, con un sentimiento de tristeza, sabiendo que durante un tiempo no va a haber un programa que lo sustituya. Por lo menos, nos queda la Roskosmos y sus Soyuz. Hace unos días saltaba también la noticia de la posible cancelación del proyecto James Webb. La noticia es más compleja de lo que puede parecer a simple vista y tiene sus implicaciones, así que os recomiendo leer esta entrada de Daniel Marín.

Pero vamos a poner un poco de perspectiva. Os propongo un juego visual: encontrar nuestro pequeño punto azul pálido (en este caso, el presupuesto de la NASA) en la siguiente infografía:

Infografía de Information is beautiful.

Los datos de la infografía corresponden al año 2009, concretamente el relativo a la NASA es el presupuesto para el 2010. Para el 2012, a la NASA le han vuelto a bajar el presupuesto. Concretamente en 2000 millones de dólares, a 16800 millones de $. Dicho así parece mucho, pero vuelve a mirar el gráfico de arriba o compara el presupuesto de la agencia Roskosmos rusa con el presupuesto de los clubes de fútbol españoles. O con el dinero del rescate bancario.

Para mí, la cuestión es simple: el dinero que se invierte en la Roskosmos o en la NASA se invierte en investigaciones científicas, lo que se traduce en una ampliación de nuestro conocimiento del mundo, en progreso y en hacernos vivir mejor. Por ese mismo precio también puedes mantener fresquitos a los militares americanos en sus tiendas de Iraq y Afganistán. Personalmente, prefiero lo primero.